Hace tiempo que no siente
cautivo y desarmado
el rojo que no miente.
En este siglo sin musa
apuesta por la medusa
que te mira y eres piedra
dando siempre más de lo que lleva.
Arriesga tu rojo al negro,
futuro cromático
siguiendo lo clásico.
Algunos te dirán “tonto”,
pero el camino del sentir
enfrentado siempre al monto
es la sinfonía del buen vivir.
Aun sin ser a la primera
nunca dejes de creer,
de seguir la quimera.
Vibración ilusionante,
que a primera vista late
en tiempos de mar y plata
cuando alguien le inyecta mate.
Te preguntas hasta cuándo,
nunca piensas en el cuánto,
pero te diré algo: eso es vida, cuate.