Suena Murder Most Foul, último tema de Bob Dylan; Réquiem por el Imperio de los Estados Unidos de América, himno del fin de una época.
Quién nos lo iba a decir. Las invasiones bárbaras de nuestra época no emplean armas de hierro, sino invisibles microorganismos. Quién nos lo iba a decir. La naturaleza asestando el golpe mortal a Occidente, Imperio de los dos mil años que terminaría acorralando a nuestro propio planeta. Quién nos lo iba a decir. Antes de los efectos devastadores del cambio climático, una casualidad vírica en un mercado alimentario chino nos pone a prueba.
Suena Murder Most Foul, el mismo día que la Unión Europea da luz verde a su autodestrucción. El día en que un ministro holandés, portavoz de Alemania, muestra la desalmada autoridad del pirata. Y esto aparecerá en los libros de Historia. Europa incapaz de ser Europa, la cuna de la civilización defendiendo la barbarie.
Quién nos lo iba a decir. España enfrentada una vez más; consigo misma y con el futuro. Quién nos lo iba a decir. Una crisis global que nos sorprende sin red, al borde del precipicio. Quién nos lo iba a decir. “Es el mercado, amigo”, no solo era un lema, sino también un protocolo de acción frente a pandemias.
Suena Murder Most Foul, y aun así soy optimista. Sueño con una Europa unida frente a la crisis, solidaria. Eso, o el fin de la Unión Europea. Sueño con una red de seguridad global, contrapeso a los mercados internacionales para coordinar protocolos de acción frente a pandemias, regular los mercados internacionales, fijar mínimos fiscales, planes de cooperación con el Sur global, lucha contra el cambio climático… La utopía de nuestros tiempos.
¿Quién nos lo iba a decir? Muchos nos lo dijeron. Nos advirtieron de la decadencia de Occidente. Muchos nos dijeron: dejad las armas a un lado cuando estáis a tiempo. Quizás sea tarde, pero Occidente tiene una última misión: poner fin a la Era de los imperios. Recordar su origen, Atenas, y acompañar la globalización del mercado de una globalización de la democracia. Única forma de convertir el Réquiem por el Imperio de los dos mil años, música melancólica, en The times they are a-changin´, música de una generación que soñó con cambiar el mundo.